El segundo lugar fue para Leandro Santoro, de Unión por la Patria, que obtuvo el 27,35%. El peronismo porteño, que había llegado como favorito en algunas encuestas, no logró consolidar ese impulso. “El PRO como proyecto político dejó de representar a la mayoría de los porteños”, afirmó Santoro, en una lectura política del resultado que apuntó directamente a la histórica hegemonía amarilla en la capital.
En efecto, el PRO sufrió un golpe severo: Silvia Lospennato, su principal candidata, quedó tercera con apenas el 15,92% de los sufragios. La caída representa uno de los peores desempeños del partido en los últimos 18 años de gestión ininterrumpida en la Ciudad. “Los resultados no son los que esperábamos”, admitió Lospennato, visiblemente afectada.
Horacio Rodríguez Larreta, por su parte, obtuvo el 8,08% de los votos y se mostró eufórico con su cuarto puesto. Su lista logró asegurar tres bancas en la Legislatura. En contraste, la izquierda, representada por Vanina Biasi, no alcanzó el piso del 3,5% y perdió una banca: tendrá ahora solo dos representantes.
Otras fuerzas como UCeDé (con Ramiro Marra), la Coalición Cívica, Evolución, Principios y Valores, el MID y Justa, Libre y Soberana no lograron superar el umbral electoral necesario para ingresar al recinto legislativo.
El dato más llamativo fue la baja participación: solo el 53,3% del padrón asistió a votar, el nivel más bajo en décadas. Factores como el desinterés ciudadano, el desdoblamiento de los comicios, el temporal climático y el creciente desencanto político podrían explicar esta marcada abstención.
Desde el entorno presidencial, la victoria de Adorni fue celebrada con entusiasmo. Javier Milei compartió una foto junto a Karina Milei y su estratega Santiago Caputo, festejando lo que consideran una ratificación del rumbo político libertario, informó el portal TN.