A casi nueve meses de la investigación, la causa por presunta sedición y conspiración contra la cúpula de la Jefatura de Policía, y que tiene como sospechosos a ocho exagentes de esa fuerza, se centró en las últimas semanas en la resolución de trámites vinculados al estado procesal de los imputados.
Son recursos expuestos por los abogados defensores de los detenidos, como pedidos de excarcelación y cese de prisión preventiva -en el caso del ex policía Diego Correa-, y una solicitud de prisión domiciliaria para los imputados Iván y Alejandro Arrieta, que permanecen detenidos en la Unidad Penal I de Loreto. Según dieron a conocer los letrados y los familiares, esos recursos les fueron denegados en los juzgados intervinientes.
Entre los más recientes movimientos, el expediente incorporó a fines de mayo nuevas testimoniales de otros agentes que aportaron sus versiones sobre la supuesta organización de la toma del edificio de la Jefatura ocurrido en agosto del 2024. Después de esa ronda de testigos, este diario pudo saber que no se sumaron nuevos elementos probatorios.
Por otro lado, voceros judiciales precisaron a El Territorio que resta que sean revisados los recursos de las defensas. Algunos deben analizarse aún en la Cámara de Apelaciones de Posadas y otros, en última instancia, por el Superior Tribunal de Justicia.
Fuentes con conocimiento del caso explicaron que la instancia de resolución de los pedidos de excarcelación y habeas corpus serían el paso determinante para decidir si el grupo de acusados por sedición quedaría en libertad. Cabe mencionar que en esta etapa Ramón Amarilla estaría excluido, ya que el vocero del sector policial fue excarcelado el viernes 15 de junio, después de haber sido electo diputado provincial por el partido Por la Vida y Los Valores en los últimos comicios del 8 de junio.
Tras la liberación de Amarilla, familiares reforzaron sus expectativas de que las causas de sus parientes tengan una pronta resolución. Pero no hay fecha estimada de cierre de la instrucción, según adelantó una voz confiable de la causa a este matutino.
Sobre los avances en las pesquisas, Ramón Grinhauz, abogado de Amarilla, aclaró que la situación judicial de su cliente -ya en libertad- no cambió y reprochó lentitud en el tratamiento de los pedidos defensivos. “La causa sigue su investigación, que no es muy compleja porque los elementos probatorios recolectados ya son suficientes”, explicó ante los medios.
Para el letrado “no hay ningún hecho para imputarles ni a Amarilla ni a los otros siete policías. Y si lo hubiese, con el tiempo que ya tienen de detención ya tendrían que estar en libertad”, criticó.