Ante las contradicciones en los relatos y las pruebas recolectadas en la casa, la UFI N°4 de Moreno–General Rodríguez, a cargo del fiscal Bornia, ordenó la intervención de la Policía Científica y la realización de la autopsia para determinar con precisión las causas de la muerte.
Durante la investigación, Torrico Mendoza admitió haber provocado la asfixia de su hijo, lo que derivó en su inmediata detención por orden de la fiscalía, indicaron fuentes policiales a TN.
El hombre de 30 años quedó detenido acusado de “homicidio agravado”, mientras que la madre permanece a disposición de la Justicia para ampliar su declaración.
Los investigadores ahora intentan reconstruir los episodios previos de violencia y determinar si hubo omisiones por parte del entorno familiar o institucional. Según testigos, el nene había sido visto con lesiones días antes de su muerte.